¿Has oído hablar de la ingeniería de menús? ¿Te suena a un programa de la NASA? No te preocupes, es mucho más sencillo y puede ser la herramienta definitiva para sacar el máximo rendimiento a tu negocio.
La ingeniería de menús es un concepto que hace referencia a cómo controlar de manera eficiente y óptima las variables más importantes para el rendimiento, tanto cuantitativo como cualitativo, de tu negocio.
Aplicando este método podrás conseguir aumentar el valor de tu tique medio, o que la percepción de tus clientes al leer la carta de tu menú sea lo más atractiva posible.
A continuación, te vamos a explicar qué variables tienes que controlar en tu día a día para mejorar el rendimiento de tu negocio:
- Hacer un escandallo óptimo de tus recetas
- Analizar tu propuesta gastronómica a fondo
- Poner nombres adecuados para tus platos
- Aprender a diseñar la carta de tu menú
- Analizar el efecto psicológico de los precios
- Gestionar a tu equipo
CÓMO OPTIMIZAR EL ESCANDALLO DE NUESTROS PLATOS
Aquí debemos tener muy presente los siguientes aspectos:
- Peso en bruto del producto: es el peso total de este producto
- Peso neto del producto: el peso al quitar la merma
- Merma: es la parte del producto que no vamos a poder utilizar
- Precio unitario: el coste del ingrediente en € el kg
- Precio total: la proporción del precio total del producto calculado sobre su peso bruto
Si en cada receta aplicamos este criterio para escandallar, seremos capaces de optimizar todos nuestros gastos.
APRENDE A ANALIZAR TU PROPUESTA GASTRONÓMICA
Analizar tu propuesta gastronómica a fondo te puede dar la clave de cómo mejorar y optimizar la carta de tu menú. Para ello, tienes que decidir el tipo de platos que quieres ofrecer, y cuantos apartados va a tener tu carta; entrantes, primeros, segundos, postres, bebidas… Hay estudios que demuestran que cada una de las categorías no debe superar un máximo de 5 platos.
A través de este análisis, conseguirás equilibrar tu oferta, y adaptarla en función de las preferencias de tus clientes.
PONER NOMBRES ADECUADOS PARA TUS PLATOS
Los nombres de los platos de la cartason los que harán que tus clientes se enamoren de ellos o no. Debes apostar por descripciones concisas y apetitosas a la vez. Describe la técnica utilizada, la textura principal o algún sabor sorprendente.
EL DISEÑO DE LA CARTA
El triángulo de oro te puede dar la clave del éxito de los platos que a ti más te interesen. La neuropsicología ha descrito que los ojos humanos lo primero que miran es el centro de un diseño, seguidamente van a la esquina superior derecha, y finalizan en la parte superior izquierda. Este triángulo que te acabamos de describir te tiene que dar la clave de dónde poner los platos que más te interesa vender para que los clientes los elijan de manera natural.
EFECTO PSICOLÓGICO DE LOS PRECIOS
Los precios, el eterno debate que debemos afrontar y qué quebraderos de cabeza nos dan. Te proponemos algunas cosas sencillas que pueden ayudar. Hay estudios que demuestran que los clientes gastan más si no ven el símbolo del euro. Por eso, opta por eliminar el símbolo del € al lado del precio de tus platos.
Evita poner puntos suspensivos entre el nombre del plato y el precio, ya que muchas veces dificulta la lectura y hace que el cliente se canse de leer. Siempre que sea posible, pon precios redondos a cada plato, así conseguirás que tu propuesta sea más elegante a los ojos del cliente.
TU EQUIPO SON TUS OJOS Y MANOS
Por último, y quizás el punto más importante; tu equipo debe funcionar como un reloj. Para esto, la comunicación debe ser constante; antes del servicio, haz una reunión de equipo para explicar si hay alguna propuesta nueva en la carta, cuántas raciones quedan de cada plato, qué recomendaciones deben tener en cuenta para los clientes, y cualquier otra variable que pueda hacer que todo funcione a la perfección.
Al final, notarás los beneficios que te reportará esta forma de organización. Si necesitas más información sobre este tema, contacta con nosotros a través de nuestra página web.
