Ya eres un experto en la técnica para conseguir un espresso perfecto, conoces al dedillo tu máquina de café y tu molinillo profesional. Sin embargo, no puedes olvidar que la leche juega un papel clave en el resultado final de un café. Hoy analizamos para ti en qué conceptos fijarte al seleccionar la leche para tu cafetería. ¿Estás listo? Coge lápiz y papel que arrancamos.
Leche: Mejor entera que desnatada
A pesar de que un gran número de personas, entre ellos muchos de tus clientes, consumen a diario leche desnatada o semi-descremada, la leche entera es la que mejores resultados presenta a la hora de preparar café. Su porcentaje de grasa hace que esta bebida se comporte de manera muy específica al ser tratada a altas temperaturas.
Elegir entre estas tres variedades de leche dará resultados distintos en cada taza. Una de tus tareas principales es satisfacer al cliente, pero no debes olvidar que el porcentaje de grasa marcará la diferencia en el resultado final.
Proveedores de confianza
Al igual que con el resto de suministros para tu negocio, es imprescindible que controles periódicamente y de forma escrupulosa la calidad de la leche que recibes. Si un producto no está a la altura de las necesidades de tu cafetería, llega el momento de valorar otras opciones, con el mismo u otro proveedor. Cuanto más estrecha y honesta sea tu relación con el proveedor, mejores resultados obtendrás en el largo plazo.
Por este motivo, es también recomendable poder comprobar la correcta trazabilidad del producto y conocer su origen. A día de hoy, un gran número de baristas apuestan por productos regionales o locales como garantía añadida.
No bebo leche, ¿qué me puedes ofrecer?
En estos momentos, en los que existe una gran variedad de bebidas vegetales y leches funcionales (sin lactosa, enriquecida en vitaminas, minerales o calcio) a la venta en las grandes superficies, muchos usuarios acuden a sus cafeterías de confianza sabiendo que pueden consumir su café como en casa.
Esto no debe ser un impedimento para tu negocio, al contrario, puede marcar la diferencia con la competencia. Tienes un gran abanico de bebidas entre las que escoger y con las que deleitar a tus clientes, explicándoles cómo afecta la leche al resultado final de una taza de café, y ofreciéndoles una mayor variedad que te permitirá diferenciarte.
